Los perros que arrastran sus patas traseras suelen padecer una forma de parálisis, que está relacionada con el sistema nervioso, el sistema muscular y el sistema espinal. Los perros que arrastran sus patas traseras deben ser llevado a su veterinario inmediatamente porque si el problema no se resuelve rápidamente, el perro puede quedar completamente paralizado.
En situaciones de parálisis, "cuanto antes reciba tratamiento el perro, mejor será el resultado", escribe la escuela veterinaria de la Universidad de Purdue. Muchas veces, el perro tendrá que ver a un especialista para obtener los mejores resultados.
El motivo del arrastre de las patas traseras suele estar relacionado con un traumatismo, como la rotura de discos vertebrales, la mielopatía degenerativa o un accidente automovilístico. Otras causas incluyen polimiositis, polineuritis, moquillo y émbolo, así como cáncer y tumores.
En los casos de trauma, el cerebro del perro no puede decirle a sus músculos y nervios que muevan las piernas. La comunicación entre el cerebro y el cuerpo se ha cerrado. Si la parálisis solo afecta las patas traseras, eso significa que la comunicación aún funciona entre el cerebro y las patas delanteras. La parálisis puede ocurrir en todo el cuerpo y también es posible que el cerebro no pueda comunicarse con los pulmones para respirar. Todo diagnóstico y tratamiento dependerá de la condición que escriba PetMD.