Los europeos estaban interesados en África debido a la abundancia de materias primas para industrias, minerales, mano de obra barata y para expandir sus territorios. Algunos de los países que estaban especialmente interesados en África incluyen Gran Bretaña, Francia y Portugal.
Uno de los temas de interés más importantes en África fue la abundancia de materias primas para las industrias que se estaban desarrollando en Europa. Encontrar mano de obra barata en forma de esclavos fue otra motivación clave para los europeos.
Dado que los diferentes países estaban expandiendo su gobierno o territorios, la mayoría de los países europeos consideraron necesario conquistar África antes que sus competidores. La necesidad de asegurar varios establecimientos comerciales fue otra causa de interés en África.