Hubo varias razones por las cuales las personas, especialmente los jóvenes, optaron por unirse al ejército durante la primera guerra mundial, incluidos los sentimientos de patriotismo, el deseo de aventura y otros motivos. Muchos jóvenes vieron unirse El ejército como una oportunidad para ver el mundo. También pueden haber sido estimulados por amigos y familiares.
Al principio, unirse al ejército no se consideraba una profesión tan peligrosa, particularmente porque la gente creía que la guerra terminaría rápidamente. Sin embargo, a medida que se desarrollaba el estancamiento y aumentaba el número de muertos, hombres y mujeres que se alistaban en el ejército se unieron por razones más serias. La gente también fue persuadida por los muchos carteles de propaganda que existieron durante ese tiempo. Estos carteles mostraban el servicio en el ejército como una causa noble, y eran especialmente populares en los Estados Unidos. Con el tiempo, muchos países también recurrieron al servicio militar obligatorio, reclutando por la fuerza a personas para servir en el ejército mientras la guerra se desarrollaba e incurría en bajas drásticas.
