Neville Chamberlain fue primer ministro del Reino Unido antes de Winston Churchill. Chamberlain asumió el cargo el 28 de mayo de 1937, y su mandato terminó el 10 de mayo de 1940.
La política por la que más se recuerda a Neville Chamberlain es el "apaciguamiento", que describe su enfoque de la creciente amenaza de la Alemania de Adolf Hitler. Con el fin de aplacar al dictador, Chamberlain y otros líderes europeos consintieron en las demandas belicosas de Hitler de más territorio en Europa. Le permitieron fusionar a Austria con el estado alemán en 1938, y luego se reunieron con Hitler en la Conferencia de Munich en 1938, aceptando que Alemania absorbiera los Sudetes, una parte de Checoslovaquia que tenía una gran población alemana. Aunque declaró la guerra a Alemania después de que Hitler invadiera Polonia, el gobierno de Chamberlain había perdido el apoyo de su propio partido. Los partidos en el Parlamento acordaron apoyar a Winston Churchill como jefe de un gobierno unido.
