El ADN se replica para hacer copias de sí mismo. Este es un proceso indispensable que permite que las células se dividan para que un organismo vivo crezca o se reproduzca. Cada nueva célula necesita una copia de ADN, que sirve como instrucciones sobre cómo funcionar como una célula.
El ADN se replica antes de que una célula se divida. El proceso de replicación es semiconservador, lo que significa que cuando el ADN crea una copia, la mitad de la cadena antigua se retiene en la cadena nueva para reducir el número de errores de copia. El ADN contiene el código para construir un organismo y asegurarse de que el organismo funcione correctamente. Por esta razón, el ADN es a menudo llamado el plano de la vida. Su función es comparable a la de un constructor que usa un plano para hacer una casa. El plano contiene todos los planos e instrucciones necesarios para el organismo. Trae la información para hacer las proteínas de una célula, que son responsables de implementar las funciones de un organismo y determinar las características del organismo. Después de reproducirse, la célula pasa esta información crucial a las células hijas. La replicación del ADN ocurre en el núcleo de los eucariotas y el citoplasma de los procariotas. El proceso de replicación es el mismo, independientemente de dónde se lleve a cabo. Varios tipos de células replican su ADN a diferentes velocidades. Algunos se someten a varias rondas de división celular, como las del corazón y el cerebro de un humano, mientras que otras células se dividen constantemente, como las de las uñas y el cabello.