El titanio es significativamente más fuerte que el platino. De hecho, el titanio es el metal natural más duro. Los productos de titanio no se abollan, doblan ni rayan tan fácilmente como los artículos de platino.
Hay varias otras diferencias entre estos metales. Aunque el titanio es resistente a los rasguños, es más fácil remover las marcas del platino que el titanio. El platino es denso y pesa más que una cantidad igual de titanio. El titanio es un metal mucho más común, por lo que los productos son significativamente más baratos cuando se fabrican con él. El platino mantiene una mejor apariencia con el tiempo porque el titanio se oxida cuando se expone a altas temperaturas. Una similitud entre los dos metales: ambos son hipoalergénicos.
