La Federación Nacional de Vida Silvestre explica que se cree que el calentamiento global es causado por el efecto invernadero, que es el resultado de ciertos gases en la atmósfera que atrapan el calor del sol y evitan que se irradie de regreso al espacio. < /strong> Hay muchos gases responsables de este efecto, incluyendo vapor de agua, dióxido de carbono y metano. Los clorofluorocarbonos producidos artificialmente, conocidos como CFC, son agentes de efecto invernadero extremadamente efectivos, molécula por molécula, pero están presentes solo en pequeñas concentraciones.
Gran parte de la luz del sol pasa a través de la atmósfera terrestre y golpea el suelo. La luz reflejada a menudo tiene una longitud de onda diferente a la luz entrante. La información de datos climáticos explica que estas longitudes de onda pueden ser absorbidas por las moléculas de gases de efecto invernadero, lo que eleva la temperatura del aire. El vapor de agua, causado por la evaporación, actúa en un amplio rango de longitudes de onda. El dióxido de carbono y el metano son igual de efectivos en la absorción de energía, pero en una parte más corta del espectro.
La información de datos climáticos muestra cómo algunos de estos gases se producen naturalmente. El metano es un producto de degradación natural de ciertas bacterias, y el vapor de agua entra al aire de forma natural como parte del ciclo del agua. Recientemente, sin embargo, la agricultura humana y la industria han aumentado dramáticamente las concentraciones de estos gases en el aire. Se estima que desde el comienzo de la Revolución Industrial, los humanos han emitido aproximadamente 500 mil millones de toneladas de dióxido de carbono, aproximadamente la mitad de las cuales permanece en la atmósfera. Estos gases son la principal causa de calentamiento en el último siglo, según la Federación Nacional de Vida Silvestre.