Aunque la terapia de reemplazo hormonal es el tratamiento más eficaz para los síntomas menopáusicos severos, como insomnio, sudores nocturnos, sofocos y cambios de humor extremos, algunas mujeres tienen un mayor riesgo de cáncer de seno o de útero cuando usan la TRH, informa WebMD La TRH reduce el riesgo de osteoporosis en muchas mujeres, pero aumenta los riesgos de apoplejía y ataque cardíaco. Una mujer con una predisposición genética para la enfermedad cardiovascular, el cáncer de mama y los coágulos de sangre no es un buen candidato para la TRH.
Una mujer que comienza la TRH al comienzo de la menopausia puede experimentar un menor riesgo de demencia, pero podría aumentar su riesgo de trombosis venosa profunda y embolia pulmonar, según la Clínica Mayo. Un médico considera la edad de una mujer, sus síntomas y la duración y la causa de su menopausia al sopesar los pros y los contras de prescribirle una TRH. Una mujer toma la dosis más baja requerida para tratar sus síntomas y solo mientras los síntomas persistan.
Ciertos antidepresivos tratan los síntomas en mujeres perimenopáusicas y menopáusicas, lo que las convierte en alternativas viables a la TRH, explica WebMD. El estrógeno y los lubricantes vaginales alivian la sequedad, y la hierba cohosh negra es efectiva para algunas mujeres. La hormona paratiroidea sintética, los bifosfonatos y una nueva formulación de estrógeno sintético llamada SERM ayudan a prevenir el adelgazamiento de los huesos de la osteoporosis, al igual que los ejercicios con pesas, los suplementos de calcio y vitamina D.