Según MDhealth.com, algunos de los síntomas más comunes del bajo nivel de estrógeno incluyen trastornos del sueño, sudores nocturnos, sofocos, palpitaciones y escalofríos del corazón. Además, las mujeres a veces experimentan sequedad de la piel, ojos y vagina.
MDhealth.com afirma que los síntomas experimentados varían dependiendo de cuán bajo sea el nivel de estrógeno. Además de los otros síntomas mencionados, las mujeres con estrógeno bajo también experimentan a veces un aumento de peso, frecuentes dolores de cabeza, dolor en las articulaciones y disminución o pérdida de la libido. Consulte al médico para un análisis de sangre para determinar el nivel de estrógeno. Esta condición se caracteriza por un nivel de estrógeno en la sangre que es inferior a 100 picogramos por mililitro.
Según MDhealth.com, el estrógeno bajo es común en las mujeres que se acercan a la menopausia, tienen quistes en los ovarios, están amamantando, tienen problemas con sus glándulas pituitarias, padecen trastornos de la alimentación, toman medicamentos para la fertilidad o realizan ejercicio excesivo. Este problema de salud a menudo se resuelve de forma natural o con una intervención médica mínima, al mantener una dieta saludable, aumentar la ingesta de cafeína y hierbas como la arándano, regular la duración e intensidad del ejercicio y detener el consumo de tabaco. Si estos métodos simples no funcionan, los profesionales de la salud a veces recomiendan una terapia de reemplazo hormonal para devolver el estrógeno a su nivel normal.