Los compuestos moleculares tienen bajos puntos de fusión y ebullición. Son malos conductores de la electricidad y son insolubles en agua pero solubles en compuestos orgánicos como el alcohol y el éter. Los compuestos moleculares se forman al compartir pares de electrones entre los átomos.
Los enlaces formados por el intercambio de electrones se llaman enlaces covalentes. Los compuestos moleculares pueden tener un enlace covalente simple, doble o triple dependiendo del número de pares de electrones compartidos entre los átomos que forman el enlace.
Los enlaces covalentes entre los átomos en un compuesto molecular son fuertes, y esto da lugar a formas específicas de moléculas en compuestos covalentes. Una molécula de hidrógeno se forma cuando dos átomos de hidrógeno comparten un par de electrones para completar el doblete de electrones en la capa más externa.
Una molécula de oxígeno se forma cuando dos átomos de oxígeno comparten un par de electrones. El número atómico de oxígeno es 8 y tiene seis electrones de valencia en su capa más externa. Para completar la capa exterior con ocho electrones, el átomo de oxígeno necesita dos electrones. Los dos átomos de oxígeno comparten un par de electrones y forman un solo enlace covalente. Por lo tanto, ambos átomos de oxígeno adquieren la configuración electrónica estable de octetos.
De manera similar, una molécula de nitrógeno se forma cuando dos átomos de nitrógeno comparten tres pares de electrones para formar un triple enlace covalente entre los dos átomos de nitrógeno.
