Los organismos autótrofos producen su propio alimento al convertir los materiales inorgánicos en moléculas orgánicas, mientras que los organismos heterótrofos no pueden producir su propio alimento. Los heterótrofos dependen de los alimentos que provienen de otros organismos.
Las plantas son autótrofas porque utilizan la fotosíntesis para producir su propio alimento. Durante la fotosíntesis, las plantas utilizan la energía del sol para producir azúcar. Utilizan este azúcar como fuente de alimentación. Algunos autótrofos producen alimentos mediante un proceso llamado quimiosíntesis. Durante este proceso, el organismo produce alimentos utilizando la energía producida por las reacciones químicas.
La mayoría de los organismos son heterótrofos porque no pueden producir su propio alimento. Este grupo de organismos incluye todos los tipos de hongos y animales. Algunas bacterias también se clasifican como heterótrofos según UCSB ScienceLine.