¿Cuáles son algunos tratamientos caseros para el zócalo seco?

Los remedios caseros para el tratamiento del zócalo seco incluyen enjuagues con peróxido, agua salada y jugo de limón, compresas de bolsas de té frías o gasa empapadas con aceite de clavo de olor, y pastas hechas de cúrcuma salina y aceite de mostaza. Los enjuagues con peróxido y solución salina son antisépticos efectivos y evitan que se desarrollen infecciones.

Las bolsas de té frío usadas como compresas contienen taninos que reducen el dolor. Otros métodos, como las compresas de aceite de clavo o las pastas de cúrcuma y mostaza, contienen sustancias químicas que alivian el dolor y forman barreras para evitar que las infecciones y los desechos entren en contacto con las terminaciones nerviosas.

El zócalo seco se produce cuando el coágulo de sangre que normalmente se forma después de una extracción dental para proteger las terminaciones nerviosas y el hueso no se forma o se desprende. Los pacientes generalmente experimentan un dolor intenso cuando el sitio se infecta o cuando los desechos de los alimentos entran en contacto con las terminaciones nerviosas expuestas.