Los síntomas de una infección en el hueso de la mandíbula incluyen enrojecimiento o hinchazón, drenaje de pus desde el área de la mandíbula y dolor en la mandíbula o la boca, según Johns Hopkins Medicine. Los pacientes con síntomas de infección de la mandíbula deben ser tratado de inmediato para evitar que se desarrollen problemas de salud graves.
Las infecciones de los huesos de la mandíbula y los abscesos dentales se forman cuando no se trata una cavidad y se forman bacterias en la boca o cerca de la mandíbula, explica Johns Hopkins Medicine. Los odontólogos especializados suelen recetar antibióticos y drenar la infección. En algunos casos, los pacientes requieren cirugía oral para extirpar un diente infectado o para reparar partes del hueso de la mandíbula.