Las proteínas contribuyen a todas las funciones fisiológicas de los organismos vivos, señala Hyperphysics. Estas incluyen el transporte de sustancias alrededor del cuerpo y de las membranas celulares, catalizando reacciones químicas y proporcionando integridad estructural a órganos y tejidos.
Las proteínas son macromoléculas biológicas que constituyen aproximadamente el 75 por ciento del peso seco del cuerpo humano. El genoma humano codifica entre 20,000 y 25,000 proteínas, señala el National Institutes of Health. Algunos genes pueden codificar múltiples proteínas, y las proteínas pueden modificarse químicamente, como la fosforilación, para alterar su función de acuerdo con la naturaleza, por lo que la cantidad de moléculas de proteínas humanas únicas es probablemente mucho mayor que esto.
Las funciones de las proteínas en el cuerpo humano son increíblemente diversas. La hemoglobina, que reside en los glóbulos rojos, transporta oxígeno por todo el cuerpo. Los canales de potasio, que están presentes en las membranas celulares, permiten que los iones de potasio entren y salgan de la célula, lo cual es vital para la comunicación entre las células en el sistema nervioso central. La queratina es una proteína estructural que proporciona fuerza al cabello, las uñas y la capa externa de la piel. La miosina es una proteína en las células musculares que se arrastra a lo largo de los filamentos de una proteína estructural, la actina, para provocar la contracción muscular. Finalmente, la hexocinasa, que cataliza el primer paso de la descomposición de la glucosa, es un ejemplo de una enzima, una proteína que cataliza una reacción química desfavorable energéticamente, según el Instituto Europeo de Bioinformática.