Una especie de rape, el rape, puede vivir más de 20 años. El rape es conocido por sus cabezas desproporcionadamente grandes que comprenden la mayor parte de su tamaño. Muchas especies de rape tienen al menos un apéndice largo con forma de gusano que funciona como un señuelo para atraer a la presa.
En ciertas especies de rape de alta mar, la bioluminiscencia se puede implementar como otro medio para atraer presas. Una vez que un objetivo está al alcance, el tamaño extremo de la boca del rape le permite devorar su presa entera.
El rape es sexualmente dimórfico, y los machos miden solo una fracción del tamaño de las hembras. Los machos de algunas especies son tan pequeños y poco desarrollados que deben adherirse a las hembras y actuar como parásitos.