Las glándulas salivales existen para producir saliva, un fluido que juega un papel importante en la digestión, el equilibrio del pH y la higiene. Las glándulas salivales también juegan un papel importante en la termorregulación de algunos otros animales, como los perros. Según About.com, la mayoría de las especies poseen tres pares distintos de glándulas salivales, conocidas como glándulas parótida, sublingual y submaxilar.
Las glándulas salivales están compuestas principalmente por uno de dos tipos de células. Las células serosas segregan fluidos acuosos, mientras que las células mucosas secretan fluidos espesos parecidos a los de la mucosa. About.com afirma que las glándulas parótidas están compuestas principalmente por células serosas, mientras que las glándulas sublinguales están compuestas principalmente por células mucosas. Las glándulas submaxilares, que producen una saliva con características tanto de agua como de mucosas, están hechas de ambos tipos de células.Según About.com, el sistema nervioso autónomo controla tanto la cantidad de saliva producida como la mezcla relativa de los dos tipos. El cuerpo puede alterar la consistencia y composición de la saliva en respuesta a los estímulos. Por ejemplo, los perros que se alimentan con alimentos secos tienden a producir saliva serosa. Por el contrario, cuando los perros comen alimentos húmedos a base de carne, su saliva es predominantemente a base de moco.
La saliva es muy importante para la digestión, ya que es el primer paso en el proceso de digestión de los almidones. Además, según About.com, la saliva ayuda a mantener la boca limpia.