La palabra "mariposa" proviene de la palabra en inglés antiguo "buttorfleoge", que es una combinación de las palabras "mantequilla" y "mosca". Las razones para el nombre son oscuras.
Una teoría sobre el origen de la palabra "mariposa" dice que la palabra proviene de la idea antigua de que los insectos consumen mantequilla o leche que se deja al descubierto. A veces se creía que los insectos eran brujas disfrazadas de mariposas.
Una teoría más simple es que el color amarillo pálido de muchas mariposas recordaba a las personas el color de la mantequilla. Otra teoría dice que el nombre proviene del color del excremento de las mariposas, que se conecta al "boterschijte" afín holandés.