Según el Servicio Nacional de Salud, los dedos magullados y fracturados a menudo se ven y se sienten muy similares a la persona promedio, por lo que la única forma de notar la diferencia es hacerse una radiografía. Ningún otro método es seguro para determinar la situación. Sin embargo, si el dedo se ve deformado o se sienta en una posición incómoda, esto es una señal clara de que el dedo está dislocado o roto.
Los esguinces son comunes y son causados por un ligamento estirado. Un dedo torcido suele ser doloroso y tiene algo de hinchazón, pero el dolor y la hinchazón disminuyen gradualmente. Por otro lado, un dedo roto puede ser doloroso e inflamado por un tiempo. Los dedos rotos o dislocados deben recibir tratamiento médico profesional tan pronto como sea posible.
Los profesionales médicos deben realizar una radiografía del dedo para confirmar una lesión por rotura o dislocación. Tenga esto en cuenta cuando busque ayuda. El dedo lesionado a menudo se coloca en una férula temporal, que mantiene el dedo inmóvil. Para algunas lesiones, un profesional médico recomienda que se aplique un yeso permanente y determina si la cirugía es necesaria para reparar el daño de la fractura interna. Tenga cuidado de mantener el dedo elevado cuando sea posible y evite molestar la férula o el yeso.