Los cangrejos tienen varias adaptaciones que los ayudan a sobrevivir a la vida en la costa, como antenas, canales de embudo, garras y patas. Ayudan a comer, defenderse y cazar.
Las antenas ayudan a los cangrejos costeros a detectar posibles fuentes de alimentos. Los canales de embudo, que se encuentran en la punta de las patas, responden cada vez que un cangrejo de la costa entra en contacto con los alimentos. Esto incita al cangrejo a saltar sobre su presa.
Los cangrejos normalmente comen moluscos, que están cubiertos por conchas. Las garras de un cangrejo de orilla hacen que sea más fácil abrir las conchas y comer las partes blandas dentro del molusco. Las patas ayudan a los cangrejos a capturar a sus presas y se hunden en la arena.
Un proceso llamado autotomía hace posible que un cangrejo de orilla deseche sus apéndices. Esto es útil si el cangrejo está atrapado por un depredador o atrapado entre rocas en la costa.