Las Fuerzas Aliadas ganaron la Primera Guerra Mundial el 11 de noviembre de 1918, que se conoció como el Día del Armisticio. Las fuerzas Aliadas fueron Gran Bretaña, Estados Unidos, Francia y Rusia. Se opusieron a las potencias centrales, que comprendían Alemania, el Imperio Austrohúngaro e Italia. La guerra terminó oficialmente el 28 de junio de 1919, después de la firma del Tratado de Versalles.
Alemania fue considerada particularmente responsable como una potencia central en el Tratado de Versalles. Alsacia-Lorena, Eupen y Malmedy, Schleswig del Norte, Hultschin, Prusia Occidental, Posen y Alta Silesia fueron entregadas por Alemania bajo el Tratado de Versalles. Alemania también perdió el control de sus colonias de ultramar y sufrió severas restricciones al comercio y la industria. Alemania occidental fue desmilitarizada, y el país perdió sus submarinos y redujo el tamaño de su ejército.
Otros tratados de paz involucrados en el final de la Gran Guerra incluyen el Tratado de Saint Germain, el Tratado de Trianon, el Tratado de Neuilly y el Tratado de Sevres. Turquía también recibió un gran golpe en las cortes de los aliados, perdiendo la mayoría de sus tierras europeas y sufriendo una rotación de los ejércitos británicos, franceses y griegos. Después de cuatro años de guerra total, la mayoría de los países participantes quedaron en mal estado.
