No es probable que haya problemas si un adulto come un absorbedor de oxígeno, pero la toxicidad aguda por hierro puede ocurrir cuando un niño o una mascota come un paquete de absorbedor de oxígeno. El ingrediente activo, el hierro reducido, no se absorbe bien en el sistema gastrointestinal, según el Centro Nacional de Información Biotecnológica.
La intoxicación por hierro es una emergencia pediátrica toxicológica común, y la gravedad depende de la dosis, según Medscape. Los niños pueden o no experimentar síntomas, por lo que es importante observarlos y no introducir nuevos alimentos durante un período de tiempo. Si se presentan síntomas como vómitos, diarrea o dolor abdominal, es importante buscar atención de emergencia. Los síntomas generalmente se presentan dentro de las seis horas de una sobredosis de hierro.
Si los síntomas de envenenamiento ocurren y luego desaparecen, esto podría significar que la persona ha pasado a la segunda etapa de envenenamiento, que precede al shock, afirma el Manual Merck. La tercera etapa del envenenamiento por hierro involucra shock, fiebre, sangrado, ictericia, insuficiencia hepática y convulsiones. La cuarta etapa es la insuficiencia hepática, la muerte y el sangrado. La última etapa es la resolución marcada por cicatrización del estómago, los intestinos y el hígado.
La toxicidad aguda por hierro se trata con descontaminación intestinal, irrigación intestinal total y quelación con deferoxamina, que ayuda a eliminar el hierro del cuerpo, según Medscape.