La función del plasma sanguíneo

La función del plasma sanguíneo

La sangre fluye por todo el cuerpo, transportando oxígeno y nutrientes y regulando la temperatura corporal. Está compuesto por cuatro componentes primarios. Estos son glóbulos rojos, glóbulos blancos, plaquetas y plasma.

Conceptos básicos sobre el plasma         La porción líquida de la sangre, el plasma, comprende el 55 por ciento del volumen total de la sangre, y en sí misma está compuesta por un 92 por ciento de agua. Transporta células y plaquetas por todo el cuerpo. Cuando se separa de estos, es de color amarillo claro. Además de las células, transporta nutrientes y transporta los desechos para ser procesados ​​por los riñones y el hígado.

Una mirada más cercana      Además de los elementos enumerados anteriormente, el plasma también contiene sal, factores de coagulación, anticuerpos y proteínas. Los últimos tres artículos se extraen de sangre donada y son vitales en el tratamiento de enfermedades y lesiones.

Los factores de coagulación ayudan a formar costras protectoras sobre las heridas y previenen la pérdida excesiva de sangre. Las personas que padecen hemofilia son deficientes en este elemento y corren un grave riesgo de pérdida de sangre traumática, incluso por lesiones menores. Los anticuerpos ayudan al cuerpo a combatir enfermedades e infecciones. También llamadas inmunoglobulinas, son producidas por las células blancas de la sangre y transportadas en el plasma. Las personas con sistemas inmunitarios debilitados debido a una enfermedad o tratamiento médico pueden carecer de suficientes anticuerpos en su plasma sanguíneo.

Las proteínas de la sangre ayudan a transportar grasas y nutrientes por todo el cuerpo, además de ayudar a mantener la presión arterial adecuada. Las proteínas sanguíneas bajas pueden ser causadas por tratamientos médicos y pueden resultar en la pérdida de energía, falta de apetito y otros trastornos. Incluso una breve descripción de los elementos y deficiencias del plasma ilustra qué tan vital es la sustancia para la buena salud.

Salud del plasma      Mantener la sangre y el plasma saludables es una parte importante de mantenerse bien. Los mismos factores que afectan al cuerpo también influyen en la sangre. La falta de ciertos componentes como el hierro o el calcio, o el exceso de otros, como la grasa y el colesterol, pueden causar problemas de salud en la sangre. Fumar daña el sistema circulatorio, así como la propia sangre. El abuso de alcohol y otras drogas puede influir negativamente en la sangre. Una dieta pobre puede carecer de los nutrientes necesarios para construir una sangre saludable, lo que produce deficiencias en vitaminas, hierro y otros minerales que producen sangre y plasma. La actividad física es tan importante para la sangre como para el resto del cuerpo. Un beneficio principal es la disminución de la presión arterial, que puede aumentar la salud cardiovascular en general. Es mejor consultar a un profesional médico sobre los mejores programas de dieta y ejercicio para una salud óptima de la sangre.

Donación de plasma      La donación de sangre o plasma es uno de los actos más generosos que una persona puede realizar. Los productos sanguíneos no pueden fabricarse, y solo provienen de donantes. Son esenciales para los sobrevivientes de traumas, las víctimas de quemaduras y los pacientes de cáncer, entre muchos otros. La donación es un procedimiento seguro, relativamente indoloro, y ayuda a las personas que padecen enfermedades y lesiones como las que se mencionan anteriormente. Los donantes que cumplen con los requisitos iniciales luego se someten a un examen básico de salud. En un proceso que demora aproximadamente 90 minutos, la sangre del donante pasa por una máquina especial que extrae el plasma y devuelve las células y plaquetas. También se puede donar sangre entera, y hay una necesidad de todos los elementos de sangre.