Cuando se describe una reacción a través de una ecuación balanceada, es posible determinar la cantidad exacta de cada átomo, ion y molécula necesaria en cada lado de la ecuación. Las ecuaciones balanceadas se determinan usando una técnica conocido como estequiometría.
Cada componente de una ecuación balanceada incluye un coeficiente estequiométrico delante de ella. La estequiometría permite a los químicos determinar cuántos moles de cada reactivo producen un cierto número de moles de cada producto. Un ejemplo de una ecuación balanceada es CaCl2 + Na2CO3 = CaCO3 + 2 NaCl. El coeficiente estequiométrico de dos frente al NaCl indica dos moles por cada molécula para el resto de los compuestos en la ecuación.