Las aletas pectorales se utilizan para equilibrar y frenar. En algunas especies, se utilizan para saltar y deslizarse sobre la superficie del agua. Las aletas pectorales se encuentran detrás de las branquias de un pez.
Dependiendo del animal, la aleta pectoral tiene diferentes propósitos. En los tiburones, las aletas pectorales pueden ayudar a mantener la profundidad. En peces voladores, las aletas permiten la capacidad de mantener el vuelo. Las aletas pectorales se pueden usar para caminar, como es el caso del rape y el saltador de barro. La porción anterior de la aleta pectoral se modifica en mantarrayas para dar una estructura conocida como aleta cefálica.