Cinco características de los seres vivos, que se componen de una o más células, incluyen la capacidad de crecer, adaptarse y reproducirse, junto con la capacidad de respuesta a los estímulos y los procesos metabólicos necesarios para la supervivencia. El término " Los "seres vivos" abarcan animales, plantas y organismos simples, como amebas, hongos, virus y bacterias. Científicamente, los seres vivos se clasifican en reinos animales y vegetales, dependiendo de sus similitudes.
La célula es la unidad básica de los seres vivos, y sus procesos y componentes químicos tienen similitudes fundamentales en todos los organismos vivos. Las células contienen genes, que determinan las características únicas de los seres vivos. Además, los seres vivos requieren energía para sobrevivir. Las plantas usan el sol para hacer su comida, pero los animales dependen de la comida del ambiente. Los seres vivos se desarrollan o crecen a través de cambios organizados en la forma y en las funciones corporales.
El crecimiento también implica el proceso de reparación de células y tejidos dañados. La capacidad de respuesta al medio ambiente permite que los seres vivos se adapten al cambio y sobrevivan. La capacidad de moverse está limitada en algunos seres vivos, como las plantas. La mayoría de los seres vivos también trabajan y dependen de otras formas de vida para sobrevivir. Por ejemplo, la mayoría de los animales dependen de otros animales y plantas para obtener nutrientes. También compiten por recursos, como alimentos, humedad, luz solar y espacio. Cuando los seres vivos mueren, las bacterias y los hongos actúan sobre sus células y tejidos, causando la descomposición y la liberación de nutrientes al suelo para que las plantas los absorban y utilicen.