Tomar un analgésico de venta libre, como el naproxeno o el ibuprofeno, y presionar una compresa de hielo en la articulación afectada son pasos inmediatos a tomar para aliviar el dolor y la inflamación durante un ataque de gota, afirma la Arthritis Foundation. Los médicos a veces recetan un medicamento antiinflamatorio si ocurre otro ataque de gota. Ayuda a descansar el pie doloroso sobre almohadas sobre el nivel del pecho para reducir la hinchazón.
Para aliviar un ataque de gota, una persona debe hacer una bolsa de hielo envolviendo una bolsa de hielo triturado con un paño para platos y aplicarlo sobre la articulación dolorida durante 20 a 30 minutos varias veces a lo largo del día, sugiere la Fundación de Artritis. Los médicos pueden recomendar un nuevo medicamento, pedir al paciente de gota que se someta a una prueba de líquido articular o inyectar un corticosteroide para un rápido alivio de la inflamación. Es importante recibir tratamiento en menos de 24 horas después de un ataque de gota para que sea más corto y menos grave.
Los pacientes de gota deben beber al menos 16 tazas de agua al día para reducir el ácido úrico, que causa el dolor en las articulaciones, y prevenir el desarrollo de cálculos renales debido a los altos niveles de ácido úrico en el cuerpo, explica la Arthritis Foundation. El alcohol y los alimentos ricos en purinas agravan los ataques de gota. Los médicos recomiendan utilizar un bastón durante un ataque para reducir la presión en la articulación afectada y usar calcetines con un agujero en las zonas de los dedos.