Para acelerar la recuperación después de la cirugía de cataratas, evite agacharse en las horas posteriores a la cirugía, evite las piscinas y jacuzzis durante la primera semana después de la cirugía, y evite las actividades extenuantes durante varias semanas después de la cirugía, informa All About Vision. Seguir estas pautas minimiza el riesgo de traumatismo e infección, lo que acelera la curación.
Los síntomas típicos después de la cirugía de cataratas incluyen una sensación de irritabilidad en los ojos, picazón, secreción y dolor leve a moderado, según el Instituto Nacional del Ojo. El ojo también puede ser sensible a la luz y al tacto. La mayoría de estos síntomas desaparecen después de dos o tres días.
Las complicaciones pueden ocurrir después de la cirugía, señala el National Eye Institute. Incluyen infección, sangrado, pérdida de visión o visión doble, inflamación y problemas con la presión ocular alta o baja. Si estos problemas se identifican temprano, se pueden tratar con éxito. Ocasionalmente, el tejido que rodea la nueva lente se nubla y causa visión borrosa. Esto se denomina catarata posterior y se trata con un procedimiento quirúrgico ambulatorio.
La cirugía de cataratas está indicada cuando la visión se deteriora debido a la nubosidad de la lente a lo largo del tiempo, según WebMD. Durante la cirugía ambulatoria, la lente nublada se reemplaza por una lente sintética hecha de plástico, acrílico o silicona, que restaura la agudeza visual. Es una de las cirugías realizadas con más frecuencia en los Estados Unidos, con un excelente pronóstico.