El suelo arcilloso azul es un tipo de suelo expansivo caracterizado por su color azulado-púrpura y su alta propiedad de absorción. Esto permite que el suelo absorba agua en grandes cantidades, lo que resulta en un aumento del volumen del suelo.
En los Estados Unidos, el suelo de arcilla azul se encuentra predominantemente en la región sur de Utah. Esta capa de tierra seca se compone de partículas extremadamente pequeñas asociadas con las formaciones de caliche y bentonita del suelo. Los sedimentos que comprenden suelo arcilloso azul se depositan en ríos y lagos prehistóricos, incluidos los materiales derivados de cenizas volcánicas.
El suelo de arcilla azul causa efectos destructivos en superficies pavimentadas, pasillos y cimientos estructurales. Las viviendas y otros edificios que se construyen en un área relativamente poco desarrollada son propensos a sufrir daños graves.
