El mesosistema se refiere al punto en el que se fusionan dos microsistemas sociales. Un ejemplo de un mesosistema es la combinación de los entornos del hogar y la escuela. Estos se entrecruzan y se convierten en un mesosistema cuando los eventos, las situaciones, el trabajo y las amistades se cruzan entre ambos entornos.
Los microsistemas son parte de los entornos sociales que las personas se encuentran durante las distintas etapas de su vida. Los mesosistemas que ocurren cuando se entrecruzan varios aspectos de la vida de una persona son valiosos para aprender y adaptarse. En consecuencia, es importante tener en cuenta que estos cruces ocurren con mayor frecuencia durante la infancia, lo que afecta el desarrollo social de un niño.
Cuando un niño sale del hogar de sus padres para pasar el fin de semana con sus abuelos, tiene un conjunto diferente de valores y disciplinas que cumplir con su entorno familiar normal. Estos cambios en las expectativas y los requisitos enseñan a un niño a adaptarse y adaptarse a nuevos sistemas o situaciones. En esta situación, el niño aprende que si se adhiere a las expectativas de sus abuelos mientras visitan a sus hijos, el niño será recompensado y elogiado, mientras que las mismas acciones pueden no resultar en un elogio similar cuando están en casa, ya que las expectativas pueden ser diferentes. p>
Incluso dentro de un microsistema más grande, como la escuela, puede haber microsistemas más pequeños, lo que resulta en sus propios mesosistemas. Estos ocurren con frecuencia a medida que los estudiantes interactúan con diferentes áreas dentro de su entorno. Un ejemplo sería cuando un niño deja su clase de inglés y va a su clase de matemáticas. Este es un micro grupo diferente de amigos y un maestro con diferentes expectativas, por lo que sus acciones deben cambiar en consecuencia.