Si un perro come unas pocas semillas de manzana, no le causarán ningún daño. Las semillas de manzana contienen una forma de cianuro que es tóxica solo si se ingiere en altas dosis. Si se tragan un par de semillas, el cuerpo se desintoxicará naturalmente, de acuerdo con DogSupplies.com.
La amígdala, una forma de cianuro, en una semilla de manzana se encuentra en la cubierta de la semilla. Si la cobertura de la semilla no se rompe cuando se ingiere o durante el período de digestión, el perro no estará expuesto al cianuro, señala DogSupplies.com. Para obtener mejores resultados, retire el tallo, el núcleo y las semillas antes de alimentar a su perro con una manzana.
Las manzanas en sí mismas no son dañinas para los perros y en realidad tienen algunos beneficios para la salud, de acuerdo con Vetinfo. Son bajos en sodio y altos en vitamina C y fibra dietética. Una manzana también contiene ácidos grasos omega-3 y omega-6, que ayudan a contribuir a la piel y el pelaje de un perro. En los perros con artritis o enfermedad renal, el omega-6 puede causar inflamación en dosis altas, por lo que se recomienda a los dueños que tengan cuidado al alimentar a sus perros con manzanas si obtienen omega-6 de otras fuentes. Incluso en un perro sano, las porciones deben mantenerse razonables, ya que las manzanas pueden causar malestar estomacal o diarrea.
