Los osos panda son cazados principalmente por sus pieles de colores únicos. Según la World Wildlife Foundation, la caza de pandas se hizo ilegal a principios de los años sesenta. Antes de 1997, los cazadores furtivos de pandas en China a menudo eran condenados a muerte. Desde 1997, la pena por matar a un panda en China ha sido una sentencia de 20 años de prisión.
Aunque es probable que los pandas hayan sido cazados en China durante siglos, los extranjeros comenzaron a valorar las pieles de panda entre mediados y finales del siglo XIX. En abril de 1929, los hermanos Roosevelt dispararon a un panda, convirtiéndose en los primeros extranjeros registrados en cometer este acto. En los años que siguieron, los pandas fueron exportados de China a países extranjeros, e incluso fueron dados como regalos por los chinos. Pronto, sin embargo, las poblaciones de pandas comenzaron a disminuir, y China dejó de permitir que los extranjeros explotaran a los osos en 1946. Según la Fundación Mundial para la Vida Silvestre, una ley aprobada en 1983 aumentó el estado protector del panda con la esperanza de salvarlo de la extinción. p>
Aunque la caza representa una amenaza para la población panda, no es la mayor amenaza que la especie debe soportar. BearLife.org explica que la destrucción del hábitat es la mayor amenaza para el panda. Esta especie única prospera en los bosques de bambú, que están siendo reemplazados continuamente por terrenos agrícolas y desarrollos de viviendas.