Los pacientes con tos seca persistente deben buscar un médico para una evaluación, según MedicineNet. La tos seca persistente o crónica a menudo es un signo de una infección viral, un problema de sinusitis o estrés. Múltiples enfermedades subyacentes pueden causar otros tipos de tos crónica, como asma, goteo posnasal, reflujo esofágico, infecciones y enfermedad pulmonar intersticial. Los medicamentos específicos también incluyen la tos crónica como efecto secundario. Los tumores, la sarcoidosis, la insuficiencia cardíaca congestiva, las alergias y el enfisema son causas menos frecuentes de tos crónica.
El tratamiento de la tos crónica depende de la causa subyacente, explica MedicineNet. Los medicamentos de venta libre para la tos que contienen guaifenesina o dextrometorfano son eficaces para aliviar los síntomas, al igual que beber más líquidos, usar pastillas para la tos e inhalar vapor. La codeína y otros narcóticos recetados pueden aliviar los casos graves. Los remedios caseros, como mantener la cabeza elevada durante el sueño, evitar los productos del tabaco, consumir miel, hacer gárgaras con agua tibia y usar pastillas para la tos, pueden resultar eficaces.
Es posible prevenir la tos crónica, afirma MedicineNet. Evitar fumar es la precaución más importante. Los pacientes con asma o goteo posnasal deben consultar a sus médicos para obtener consejos sobre cómo manejar mejor sus condiciones. Evitar el contacto con personas que tienen bronquitis o neumonía reduce el riesgo de tos crónica. El consumo de más fruta con fibra y flavonoides también puede reducir el riesgo.