Los carbohidratos, las grasas y las proteínas son todos los combustibles que pueden usarse para llevar a cabo el proceso de respiración. La glucosa también se usa comúnmente para examinar las vías y reacciones involucradas en la respiración.
La respiración es el proceso por el cual las células obtienen la energía que necesitan para alimentar sus actividades. El proceso se considera exotérmico, lo que significa que todo el proceso se puede dividir en un grupo de más pequeños a medida que se produce en el cuerpo. En la respiración aeróbica, se necesita oxígeno para generar ATP, pero también se pueden usar carbohidratos, grasas y proteínas como reactivos durante el proceso.