¿Qué causó la revolución rusa de 1917?

La causa abrumadora de la Revolución rusa de 1917 fue la ineficiencia y el fracaso del régimen zarista en el esfuerzo militar de la Primera Guerra Mundial. Esto se vio exacerbado por la corrupción en el gobierno y la escasez de alimentos que causaron disturbios primero en la ciudad capital de Petrogrado y luego en otras ciudades.

Mal equipado y mal dirigido, el ejército ruso sufrió derrota tras derrota a manos de los alemanes. Cuando el zar tomó el control personal de la guerra en 1915, se le atribuyeron las continuas pérdidas catastróficas. A la gente común rusa no le gustaba que tantos jóvenes y caballos fueran enviados a la desastrosa línea frontal.

El zar de Rusia, Nicolás II, creyó en un gobierno autocrático e ignoró o disolvió el Parlamento ruso, la Duma, cuando le convenía. Su incompetencia en el gobierno y modernización de Rusia llevó a una brecha cada vez mayor entre el régimen zarista y la creciente fuerza laboral urbana. Cuando estallaron disturbios por alimentos y huelgas en Petrogrado, el zar respondió con fuerza militar contra los 200.000 manifestantes. Después de disparar inicialmente contra los manifestantes, el ejército se amotinó, se les unió y los armó. A mediados de marzo, Nicolás II renunció a su trono, lo que condujo a un gobierno provisional y, finalmente, al gobierno soviético.