Es posible que las personas en las etapas finales de la cirrosis alcancen la esperanza de vida normal, según Medscape. Sin embargo, el pronóstico varía entre cada persona y depende de los síntomas y las complicaciones.
En la etapa final de la enfermedad hepática crónica, la cirrosis se caracteriza por cicatrices irreversibles en el tejido hepático, retención de líquido abdominal y fatiga, según lo declarado por la Clínica Mayo. Algunos pacientes no presentan síntomas y pueden no experimentar complicaciones hasta que el daño alcance etapas avanzadas; la progresión se ralentiza mejor cuando el tratamiento se inicia en etapas anteriores, explica la Clínica Mayo. Las complicaciones avanzadas incluyen hipertensión en las venas hepáticas, agrandamiento del bazo y acumulación de toxinas en el cerebro; estos pacientes también corren el riesgo de desarrollar cáncer de hígado.