Se pueden producir ruidos estomacales como gruñidos, murmullos y gorgoteos mientras los alimentos se digieren después y entre las comidas, según la Clínica Mayo. Aunque a menudo se piensa que el hambre es la causa del gruñido estomacal, estos ruidos también son producidos por la liberación de ácidos y otros fluidos digestivos en el estómago.
Según The Telegraph, los ruidos estomacales se amplifican en la cavidad intestinal cuando los intestinos están vacíos. Sin embargo, algunos ruidos estomacales pueden ser causados por el consumo excesivo de bebidas carbonatadas, así como por los alimentos que se sabe que causan gases como los frijoles, el repollo, las legumbres, los espárragos, las coles de Bruselas y las cebollas. Los problemas digestivos y el retumbar de su estómago asociado también están relacionados con un estilo de vida sedentario. Para minimizar los ruidos estomacales, uno debe evitar comer rápidamente, asegúrese de masticar bien los alimentos y beber muchos líquidos durante el día. La actividad física y la reducción del estrés también ayudan a prevenir problemas digestivos a largo plazo. Si bien la mayoría de los ruidos estomacales son completamente normales, en algunos casos, el ruido excesivo del estómago puede significar un trastorno digestivo, como el síndrome del intestino irritable, la enfermedad por reflujo gastroesofágico, la intolerancia a la lactosa o las úlceras estomacales. En el caso de cualquiera de estos trastornos, el ruido estomacal suele estar acompañado de gases, distensión abdominal, cólicos y diarrea.
