La razón por la que las cosas flotan o se hunden en el agua se debe a la densidad del objeto o material. La densidad del agua es de 1.0 gramos por centímetro cúbico a 68 grados Fahrenheit. Los objetos que tienen una densidad menor que el agua flotarán, mientras que los objetos o materiales que tienen una mayor densidad que el agua se hundirán.
Si se conoce la masa y el volumen de diferentes materiales sólidos, entonces la densidad de estos materiales se puede determinar mediante la fórmula "Densidad = masa /volumen". Al comparar las densidades de diferentes materiales, es posible saber si se hundirán o flotarán en el agua o no.
Del mismo modo, los fluidos con diferentes densidades se pueden colocar juntos en un recipiente. Al examinar las diferentes capas de fluido formadas en el contenedor, se puede determinar el fluido con la mayor densidad. Por ejemplo, si se agrega aceite a un vaso de agua, el aceite flotará hacia la parte superior porque tiene una densidad menor que el agua.