Los conejillos de indias parpadean. Es raro ver a estos pequeños roedores parpadear, o incluso dormir con los ojos cerrados, pero ocasionalmente los limpian con los párpados.
Los conejillos de indias tienen ojos diferentes a los que se encuentran comúnmente en otros mamíferos, y la estructura de los ojos de los animales evita que tengan que parpadear con frecuencia para limpiar el polvo de sus ojos. Los ojos de los cobayas tienen un humor acuoso más grande de lo normal, que es un líquido transparente que cubre sus ojos, lo que evita que los desechos pequeños se sequen o los irriten. El resultado es que los roedores tienen menos necesidad de parpadear, y esto también les ayuda en la naturaleza. Como animales presa, los conejillos de indias salvajes deben tener una conciencia constante de las amenazas que los rodean, por lo que duermen con los ojos abiertos para aparecer despiertos y alertas ante posibles depredadores. Su estructura ocular única ha evolucionado para cumplir un propósito de supervivencia, aunque no es necesaria para sus contrapartes domesticadas.