Con el combustible completo, el cohete Saturn V utilizado durante la misión Apollo 11 pesaba 6.2 millones de libras, de las cuales 4.7 millones de libras eran solo combustible. Según la NASA, el Saturn V generó suficiente empuje para levantar una carga útil de 50 toneladas a la Luna.
Sin el cohete o su combustible voluminoso, la sección de la nave que llegó a la Luna era considerablemente más liviana que el ensamblaje total: el peso combinado del Módulo de Comando Lunar y el Módulo Lunar era de 48,450 libras, o algo más de 24 toneladas. Una vez que concluyó el proyecto Apollo, se usó el amplificador Saturn V para levantar la estación espacial Skylab, que es aún más pesada, a la órbita.