Una erupción roja que no pica puede ser un síntoma del VIH, pero la erupción generalmente aparece en el torso en lugar de las nalgas, según WebMD. La erupción es uno de los posibles síntomas iniciales de una infección por VIH.
El VIH tiene tres etapas. La primera etapa es la infección aguda o la seroconversión, y las personas normalmente experimentan síntomas en esta etapa dos a seis semanas después de la infección, como náuseas, diarrea, dolores musculares, fatiga y fiebre, explica WebMD. Estos síntomas son similares a los de la gripe. Las personas con VIH experimentan estos síntomas durante aproximadamente dos semanas antes de que el virus pase a la segunda etapa.
La segunda etapa del VIH es la etapa asintomática o latente, donde el sistema inmunológico del cuerpo pierde la batalla contra el VIH cuando el virus mata las células T CD4, según WebMD. Esta etapa puede durar más de 10 años, y cuando el nivel de células T CD4 de una persona cae por debajo de 200, el diagnóstico cambia a SIDA.
El síndrome de inmunodeficiencia adquirida, o SIDA, es la etapa final de la infección por VIH. La pérdida de peso rápida, la fiebre recurrente, el cansancio extremo, la pérdida de memoria y la depresión se enumeran como síntomas, informa AIDS.gov. Algunas personas experimentan manchas debajo de la piel o dentro de la boca, los párpados o la nariz, mientras que otras desarrollan llagas en el ano, genitales o boca. Otras infecciones pueden causar estos síntomas, y la única forma de diagnosticar el VIH y el SIDA es a través de análisis de sangre.