Tanto la Tierra como la estrella alrededor de la cual gira residen en la galaxia Vía Láctea. La Vía Láctea es una galaxia espiral de aproximadamente 100,000 años luz de diámetro y alberga más de 200 mil millones de estrellas, muchas de las cuales son similares al sol.
La Tierra y el Sol están en uno de los brazos en espiral hacia el borde de la Vía Láctea, a unos 28,000 años luz del centro galáctico. Esto significa que la luz que viaja desde el centro de la galaxia a 186,000 millas por segundo tarda 28,000 años en llegar a la Tierra. La Vía Láctea es una de miles de millones de galaxias en el universo conocido.