Los aztecas creían en tres dioses principales, siendo su dios principal Tezcatilpoca. También creyeron en Huitzilopochtli y Quetzalcóatl.
Tezcatilpoca sirvió como el dios de la noche para los aztecas. Los aztecas creían que controlaba el destino de los hombres. Él fue el dios que trajo la guerra y la desgracia a la Tierra. Si bien ese es el caso, Huitzilopochtli fue considerado el dios de la guerra y el dios del sol. Como dios del sol, los aztecas creían que debían alimentarlo con sangre humana, de ahí su creencia en el sacrificio humano.
El tercer dios, Quetzalcóatl, fue el segundo sol de los aztecas. Fue considerado el dios del aprendizaje y la civilización. También se creía que él era el dios que traía el aprendizaje y la agricultura a los humanos.