La dermis de la piel está formada por capas de células, tejido conectivo y varias estructuras que ayudan a mantener su función. Estas estructuras incluyen vasos sanguíneos, folículos pilosos, vasos linfáticos y glándulas.
Las glándulas en la dermis secretan sudor y sebo. El sudor ayuda a mantener la temperatura corporal. El sebo es una sustancia grasa que mantiene la humedad de la piel. Tanto el sudor como el sebo viajan a la superficie de la piel a través de pequeñas aberturas conocidas como poros. La dermis es una de las dos capas de piel. Se encuentra directamente debajo de la epidermis, que es la capa que entra en contacto directo con el entorno externo. Existen varios tipos de células en la dermis, incluidos los fibroblastos, que son responsables de la secreción del tejido conectivo.