El inventor Thomas Edison no descubrió la electricidad, ni tampoco inventó la bombilla. Lo que hizo en 1879 fue inventar una bombilla de mayor duración que era más confiable. Su primera lámpara exitosa se mantuvo encendida durante 13.5 horas.
La bombilla en sí ya se había inventado medio siglo antes de que Edison presentara sus mejoras, pero eso no hace que lo que hizo sea menos espectacular. Necesitaba encontrar el filamento correcto para que la bombilla funcionara bien. Tenía que establecer un circuito paralelo que permitiera mantener el voltaje, una red subterránea para la conducción y enchufes que tenían interruptores de encendido y apagado. Ninguno de estos descubrimientos se había hecho antes de ese momento, y todos fueron vitales para una bombilla exitosa.
