India se convirtió en parte del imperio británico en 1858. Ese año, el Parlamento británico aprobó la Ley del Gobierno de India, que disolvió la Compañía de las Indias Orientales y absorbió a India en el gobierno británico.
Durante la época del gobierno británico, aproximadamente 300 millones de indios estaban gobernados por aproximadamente 20,000 oficiales y soldados británicos, que trajeron formas británicas de medicina, ferrocarriles e irrigación. Como resultado, la economía de la India creció, pero los funcionarios británicos confundieron el éxito económico y la falta de revueltas organizadas como evidencia de que los ciudadanos indios estaban felices de estar bajo el control de la corona británica. En la década de 1920, un movimiento hacia la independencia de la India comenzó a ganar impulso. En 1947, el país se convirtió en una nación independiente.