El Canal de Suez tenía una importancia estratégica para Gran Bretaña, tanto para el transporte marítimo internacional (particularmente para la India) como para su gobierno en Egipto. Cuando a Egipto se le otorgó la independencia nominal en 1922, la seguridad de los intereses británicos en el Canal de Suez fueron mantenidos por una guarnición militar permanente.
Las fuerzas británicas se retiraron de la Zona del Canal de Suez en 1956, año en el que el canal fue nacionalizado por el presidente egipcio Gamal Abdel Nasser.
Gran Bretaña y Francia conspiraron secretamente con Israel para invadir Egipto y recuperar el control. Tras el conflicto en 1957, el Canal de Suez fue devuelto a Egipto por las Naciones Unidas, junto con reparaciones.
Aun así, las acciones de Gran Bretaña y Francia llevaron a Egipto a la lealtad con la URSS.