Los componentes principales de la sangre son plasma, glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas. El plasma es un líquido amarillento que contiene los otros componentes de la sangre, así como muchas sustancias diferentes. Estos incluyen proteínas, como la albúmina, globulina y fibrinógeno.
El plasma sanguíneo también contiene minerales y azúcar. La albúmina mantiene el plasma dentro de los vasos sanguíneos. Cuando los niveles de albúmina disminuyen, el plasma se filtra hacia los tejidos. Esto lleva al edema. El fibrinógeno ayuda a formar coágulos sanguíneos, y la globulina tiene anticuerpos para combatir las infecciones.
Los glóbulos rojos, o eritrocitos, contienen hemoglobina, la cual transporta oxígeno a las células y lleva dióxido de carbono desde las células. Los glóbulos rojos se crean en la médula ósea y son diferentes de las células normales porque carecen de núcleos.Los glóbulos blancos apoyan el sistema inmunológico combatiendo las enfermedades y ayudando a eliminar los patógenos del sistema. Hay cinco tipos de glóbulos blancos: linfocitos, neutrófilos, eosinófilos, basófilos y monocitos.
Las plaquetas son pequeñas manchas de citoplasma que ayudan a reparar pequeñas heridas y evitan que la sangre se escape. Cuando una persona sufre un corte, las plaquetas se acumulan en la herida y ayudan a sellar los vasos sanguíneos allí. Las plaquetas también tienen sustancias químicas que comienzan el proceso de coagulación.