El entierro de residuos produce gas metano a medida que se descompone, y este gas tiene varios usos en muchas industrias y prácticas, así como en la generación de electricidad a través de la combustión. En general, el entierro de residuos es menos eficiente en la generación de energía que la práctica de quemar los residuos para alimentar una turbina.
El gas metano, como un subproducto del proceso de enterramiento de desechos, es una sustancia valiosa. Capturado correctamente, se puede utilizar como combustible en muchas aplicaciones diferentes. También se puede utilizar como un precursor en la cloración de radicales libres, creando clorometanos. No es el precursor ideal para este proceso, que es el metanol, pero cumple su función.
Si bien el metano es un recurso valioso, la quema de basura produce 10 veces más energía que enterrarla y capturar sus subproductos. La ganancia principal es que el metano puede ser capturado, movido y almacenado más fácilmente que la energía producida al quemar la basura. Las emisiones producidas por los dos procesos son en realidad aproximadamente equivalentes, lo que significa que no hay una diferencia apreciable en los niveles de contaminación que generan.
Si bien la quema suele ser la mejor opción, los factores y modificadores de la situación pueden elevar la práctica del entierro y la captura, según la EPA. Estas ubicaciones requieren estudios del sitio para identificar la viabilidad e implementar técnicas.