De acuerdo con el Western Journal of Medicine, la rodilla está estabilizada por la forma de la articulación y los ligamentos que la acompañan. La articulación está formada por las protuberancias óseas locales y el cartílago circundante. Los muchos ligamentos que soportan la articulación de la rodilla incluyen los ligamentos cruzados (en forma de cruz) y los colaterales.
El artículo del Western Journal of Medicine continúa diciendo que si se lesiona un ligamento, la articulación de la rodilla puede volverse inestable. Esto hace que la rodilla se flexione o se extienda más allá de su rango normal y cause hematomas e hinchazón. La lesión del ligamento de la rodilla es común en muchos atletas y puede ser difícil de curar. Fortalecer los músculos de las piernas puede disminuir el riesgo de lesión del ligamento.