El carbono es un buen lubricante y es el componente clave del acero. El carbono también se usa como herramienta decorativa en artículos de joyería. Se usa más comúnmente como base para tinta, como la que se encuentra en las impresoras de inyección de tinta.
El carbono tiene muchos más usos que son menos conocidos. Los polímeros de carbono son los que comprenden los plásticos. El carbono se usa para formar dióxido de carbono, que se usa en muchas bebidas para darles un aspecto y un sabor borroso y burbujeante. El papel carbón está hecho de carbono. El carbono se utiliza para hacer lustres y perfumes. El carbono se transforma en freón, que se utiliza en dispositivos de refrigeración como los acondicionadores de aire.
El carbono también se utiliza para producir herramientas resistentes al calor y herramientas de corte de metales. El carbón vegetal es utilizado por estudiantes de arte de todo el mundo. Se utiliza como combustible para encender las parrillas de bar-b-que para cocinar. Muchos alimentos están compuestos de carbono, y los humanos consumen un promedio de 300 gramos de carbono por día. La digestión ayuda a descomponer estos carbonos en moléculas para que se absorban fácilmente en las paredes del estómago o los intestinos. A partir de ahí, el cuerpo utiliza estas moléculas liberando la energía que contienen.